El Balance

Si una persona tiene una pequeña empresa o muestra interés por una formación financiera y económica básica, es importante que conozca las cuestiones esenciales de un balance o de una cuenta de resultados.

El balance y la cuenta de resultados son la fotos fijas de una empresa en un momento determinado. Nos ayudan a valorar la situación patrimonial y la actividad económica.

La composición básica del balance: El activo (los bienes y derechos) y el pasivo (los dueños del activo).

El activo no corriente y el activo corriente (existencias, clientes, caja…) en una columna.

El patrimonio neto y la deuda (pasivo no corriente y pasivo corriente) en la otra columna.

¿Es importante que el activo corriente sea mayor que el pasivo corriente? ¿Cuál es el porcentaje ideal de patrimonio neto sobre la cifra total del pasivo? ¿Qué ratios básicos nos interesa conocer y manejar?

 

¿Un fondo de inversión o un plan de pensiones?

Una de las preguntas del ahorrador tradicional en depósitos, o no iniciado en el mundo de los productos financieros de inversión o de jubilación es la siguiente: ¿Qué es mejor contratar, un fondo de inversión o un plan de pensiones? ¿Qué me viene mejor si quiero formar un capital para la jubilación?

Son dos formas de ahorrar o invertir que se complementan en una estrategia de ahorro e inversión a medio y largo plazo.

Seguir leyendo

La financiación personal a medio y largo plazo

Se necesitan productos de financiación innovadores para fomentar el consumo y la inversión. Que añadan valor y nos ayuden en la planificación financiera personal a medio y largo plazo.

¿Qué echo de menos en la financiación personal a medio y largo plazo?  Productos con límites globales y a largo plazo con compromiso de amortización periódica. Sin una exigencia de finalidad específica para el uso de los fondos recibidos. Que te permitan organizar el consumo, la inversión y el ahorro con libertad y responsabilidad.

 

 

Una buena selección

En una estrategia de ahorro e inversión, diversificar es una condición necesaria pero no suficiente. Hay dos cuestiones a las que conviene prestar atención:

  • Una buena selección de activos y productos.
  • Una hoja de ruta personal bien definida y meditada.

La duración y la solvencia o calidad del emisor si hablamos de renta fija. El estilo de gestión, la apuesta por el valor o el crecimiento, o las zonas geográficas si nos referimos a la renta variable. La localización, regulación o las opciones de comercialización si estoy pensando en invertir en inmuebles.

Cada persona es un mundo. Nos guían las emociones, nuestros razonamientos y posibilidades. Asesórese, lea, investigue y decida lo que crea mejor para usted.