Es un buen momento el inicio del año para valorar nuestras finanzas y analizar la estrategia que seguimos en cuanto a productos, activos y deudas. Establecer proyecciones y comparaciones con el balance de cierre (activos menos deudas) de años anteriores.
Algunas consideraciones a tener en cuenta:
¿Con qué porcentajes de los diversos activos (renta fija, renta variable, inmuebles, dinero y otros) me encuentro cómodo? ¿Consigo ahorrar en un ejercicio? ¿Cuál es mi situación laboral? ¿Controlo mis deudas?
¿Qué conocimientos básicos tengo de productos o de matemática financiera? ¿Y de los riesgos asociados a los diversos tipos de activos? ¿Cómo me manejo en entornos financieros de tipos bajos o de repunte de la inflación?