UN BUEN LEGADO PÚBLICO ES UN TESORO
Quien no ha conocido un centro de salud (lo llamaban ambulatorio) o una carretera como las de hace 35 o 40 años en España, posiblemente no tenga la perspectiva para valorar el progreso social y económico conseguido hasta el momento actual. Lo podemos observar por ejemplo, al acudir a una cita en un centro de salud solicitada desde casa con un dispositivo electrónico, o al circular por una autovía en nuestro país recorriendo localidades de una misma comunidad o provincia en algunos casos. Y quien lo ha conocido y lo ignora, no agradece suficientemente el esfuerzo y los logros conseguidos.
Son ejemplos del legado público que se va construyendo generación a generación. Una herencia de nuestra historia reciente basada en tres motores potentes:
- La Constitución del 78.
- Nuestra pertenencia a la Unión Europea y a la zona euro.
- La fuerza innovadora y nuestra capacidad de adaptación como país. Sirva como ejemplo el avance y consolidación de nuestra actividad exportadora en los últimos doce años, después de la Gran Recesión de 2008.