El ritmo de vida acelerado y con prisas hace que en muchas ocasiones dejemos a un lado o pospongamos asuntos importantes. Me refiero a cuestiones tales como la búsqueda y creación de innovaciones que aporten valor a las personas o a seguir líneas de investigación pioneras y novedosas. Tengo la sensación de que lo urgente lo abarca todo y condiciona nuestro tiempo disponible. Las personas, las empresas y las administraciones vivimos en una permanente actitud defensiva, buscando soluciones a los problemas que nos desbordan en el día a día.
valor
Crear valor, tener respeto e implicarse
En España se empezó a hablar mucho de educación financiera de la población, a raíz de la Gran Recesión de 2008. El afán por mejorar los conocimientos en finanzas nace con vocación defensiva. El daño ya estaba hecho: nos encontrábamos ante un mercado inmobiliario desbordado por los excesos en los préstamos, o ante personas que habían contratado productos financieros que en algunos casos no eran adecuados a su perfil o conveniencia. Todo parece indicar que en esas ocasiones, primó la venta rápida sobre la información detallada y pedagógica. En mi opinión un planteamiento exclusivamente defensivo, o centrarse únicamente en la mejora de conocimientos técnicos se queda corto. Apuesto por un enfoque en el que se tengan en cuenta la creación de valor, el respeto a los seres humanos y la voluntad de implicarse en los asuntos más acuciantes que afectan al conjunto de la sociedad.
Coraje y valor
SI ESTÁS MUY ENDEUDADO
No puedes tomar decisiones de gasto alegremente, has de ser muy comedido.
Tienes que tener un plan para reducir la deuda a medio plazo y cumplirlo.
Las deudas, aunque estén a tipos de interés muy bajos, hay que pagarlas.